En el 2007 fuí invitado a la comuna de Peñalolén Santiago de Chile por los integrantes de la Brigada Buenos Días América a dictar un curso de muralismo y mural Esgrafiado.
El desafío era juntar a dos grupos de artistas urbanos característicos de Santiago, los Graffiteros y los Brigadistas, en un trabajo colectivo y con el fin de realizar un mural en técnica de Esgrafiado.
La brigada Buenos Días América, simultaneamente estaba llevando a cabo un proyecto de realización de 100 murales, los cuales cada uno representaría un año en la historia de Chile desde la masacre de Santa María de Iquique.
A este taller le correspondería la temática de Nacionalizacíon del Cobre Chileno.
Para describir el lugar, Peñalolén es una comuna ubicada en el sector suroriente de Santiago de Chile, una comuna humilde, un barrio de gente trabajadora.
El desafío era juntar a dos grupos de artistas urbanos característicos de Santiago, los Graffiteros y los Brigadistas, en un trabajo colectivo y con el fin de realizar un mural en técnica de Esgrafiado.
La brigada Buenos Días América, simultaneamente estaba llevando a cabo un proyecto de realización de 100 murales, los cuales cada uno representaría un año en la historia de Chile desde la masacre de Santa María de Iquique.
A este taller le correspondería la temática de Nacionalizacíon del Cobre Chileno.
Para describir el lugar, Peñalolén es una comuna ubicada en el sector suroriente de Santiago de Chile, una comuna humilde, un barrio de gente trabajadora.
El lugar donde funcionó el Taller de Muralismo fué en La Casa Suiza, un centro cultural, donde se desarrollan las mas variadas actividades y cursos de todos tipo.
Es el lugar donde el barrio se junta y se conecta con la cultura nacional y extrajera.
En el barrio de Peñalolén fui alojado en la casa de Carlos León, el responsable de la Brigada Buenos Días América, un luchador, un militante de la cultura y un amigo entrañable.
Recuerdo que los días sábados funcionaba en la avenida principal, un feria que ocupaba interminables cuadras. Fue quizás la feria mas grande que vi en toda mi vida, donde vendían todo tipo de cosas usadas. Lo mas que me llamó la atensión fueron los puestos donde ofrecían brazos y cabezas de muñecas. Eso fue insólito.
También recuerdo los puestos de mariscos donde vendían a precio inuasualmente barato los exquisitos CHOROS (mejillones)que la mamá de Carlos me cocinó de manera exquisita.
Es el lugar donde el barrio se junta y se conecta con la cultura nacional y extrajera.
En el barrio de Peñalolén fui alojado en la casa de Carlos León, el responsable de la Brigada Buenos Días América, un luchador, un militante de la cultura y un amigo entrañable.
Recuerdo que los días sábados funcionaba en la avenida principal, un feria que ocupaba interminables cuadras. Fue quizás la feria mas grande que vi en toda mi vida, donde vendían todo tipo de cosas usadas. Lo mas que me llamó la atensión fueron los puestos donde ofrecían brazos y cabezas de muñecas. Eso fue insólito.
También recuerdo los puestos de mariscos donde vendían a precio inuasualmente barato los exquisitos CHOROS (mejillones)que la mamá de Carlos me cocinó de manera exquisita.
Al taller se anotaron alrededor de 15 jóvenes, parte de la Brigada y parte Grafiteros de distintas comunas.
Lo que yo pude apreciar de ese taller fueron dos grupos de jóvenes que estaban ligados al arte, que se conocían pero el antagonismo ideológico era mayúsculo.
Por un lado los Brigadistas, de espíritu combativo, con ideales de cambio y con proyectos organizados desde la Brigada Buenos Días América, pensadores de lo plural, con una necesidad de mejorar la llegada y la técnica de sus mensajes a partír de murales, aunque con muy poco conocimiento del manejo del dibujo y la pintura.
Y por otro lado los grafiteros, con un manejo excelente de la técnica del spray, capaces de lograr las mas sofisticadas imagenes; pero con un enfoque individualista a la maxima potencia, reducidos a decorar sus iniciales (TAGS) y a sumar a estas algún que otro personaje, de muy escaso tamaño para no opacar las letras.
El hecho de que el taller sea colectivo y diverso, ocasionó que estos últimos terminasen avandonando de a poco el mismo.
Recuerdo que hablabamos sobre Arte en espacio Público y Estética con Etica y le pregunté a un muchacho muy habil en el manejo de la pintura en Spray "¿Cual es el objetivo de hacer grafitti? y el me respondío que lo hacía para hacerse famoso en su grupo de amigos y en su barrio.
Como se verá esta diferncia sustancial de madurez fue una de las cuestiones por la cual fue imposible que se sumaran al proyecto.
El taller siguió su curso con los brigadistas y fluyó normalmente sin que ninguno nos diéramos cuenta que ESTABAMOS HACIENDO EL PRIMER MURAL ESGRAFIADO NO DECORATIVO DE SANTIAGO DE CHILE, y , según tengo entendido el segundo de Chile, ya que el primero se había hecho unos años antes en Antofagasta.
La organización del taller fue trabajar la imagen al modo muralista, con muchos ejercicios previos de dibujo a tamaño grande y vieron las características de la composición muralista, el uso del espacio arquitectónico y demás contenidos que abarca este taller.
Habiendo finalizado la parte teórica, en la que los alumnos realizaron los bocetos de sus futuros murales, se dió una charla explicativa donde además se debatió sobre la importancia del uso de materiales nobles en la realización de los murales.
Expresé mi punto de vista acerca de que los murales en su calidad de medios masivos de comunicación, no deberían ser excluyentes.
Esto, a propósito de lo que se viene haciendo en la gran mayoría de los casos en que los muralistas optan por materiales y técnicas de fácil deterioro y frágil durabilidad.
Expuse, que "de la manera en que se estaba dando esto hacía que generaciones futuras no podían disfrutar o reflexionar frente a las obras y que esto de alguna manera las hacía exclusivas y no tan masivas.
La técnica de esgrafiado, utilizando materiales nobles como el cemento, la arena y los pigmentos minerales, daban entre otras técnicas al oportunidad futura de reflexionar sobre la obra mural desde la obra misma y no desde un recuerdo fotográfico. El mural fue concebido en un soporte arquitectónico y ese es el lugar donde funciona la obra, no en una fotografía."
Fue así que los alumnos participaron de este esgrafiado, cuyo boceto es de mi autoría, trabajando no solo como ayudantes muralistas, sino como albañiles, tomando contacto con el mural desde sus entrañas.
Actividades como colar la arena, que en santiago es muy gruesa y de color gris oscura, revocar las capas de color. hacer los pastones y esculpir el muro, fueron etapas significativas del aprendizaje en el Taller.
Dispuestas las capas y una vez marcado el dibujo, los alumnos y yo atacamos al muro con espatulas, cuchillos y diferente herramientas para conferir el relieve y otorgar los colores a los personajes y objetos.
Dos obreros Chilenos, volcando el contenido de un crisol con cobre fundido en un molde donde se solidificaba la bandera Chilena. Sobre un fondo de engranajes que otorgaban dinamismo a la composición y representaban la marcha de la industria nacional Chilena por el camino de la Soberanía de recursos.
En el año 1973 el presidente Salvador Allende, nacionalizó el cobre de Chile, dándole al país poder sobre uno de sus recursos naturales mas importantes.
Finalizada la jornada del Taller, limpiamos el mural y se organizó el acto de Inauguración del mural que quedaría en el patio interno de La Casa Suiza de Peñalolén.
(detalle del mural)
(Carlos León y Cristian Del vitto)
Mural "Obreros del Cobre" Finalizado
Cristian Del vitto en la Casa de la Moneda de Chile con la bandera de la ciudad de Berisso
muy buen trabajo en grupo.
ResponderEliminarBerisso se "internacionaliza"